En nuestro carácter de autoridades del Instituto de Derecho Laboral del Colegio de la Abogacía de la Primera Circunscripción de Río Negro, repudiamos enérgicamente las manifestaciones vertidas por el señor Presidente de la Nación, quien se refirió de manera despectiva a los abogados laboralistas calificándolos como “caranchos” y aludiendo a la
existencia de una supuesta “industria del juicio” en el discurso brindado en la empresa Sidersa el pasado 10 de octubre.
Tales expresiones resultan agraviantes, infundadas y profundamente injustas, por cuanto desconocen el rol esencial que cumple la abogacía laboralista en la defensa de los derechos de los trabajadores y en la preservación del equilibrio entre el capital y el trabajo, principio rector de nuestro orden jurídico.
La idea de una “industria del juicio” pretende instalar una visión distorsionada y malintencionada del ejercicio profesional, cuando en realidad los litigios laborales son consecuencia directa del incumplimiento de las normas protectorias del trabajo y no del accionar de los abogados que defienden a quienes ven vulnerados sus derechos.
Reivindicamos la tarea de los abogados y abogadas laboralistas, quienes con compromiso, ética y profesionalismo garantizan el acceso a la justicia de los trabajadores, haciendo efectivo uno de los derechos humanos fundamentales: el derecho al trabajo digno y a su debida protección.
Exhortamos a las autoridades nacionales a evitar declaraciones que tiendan a desprestigiar la profesión jurídica y banalizar la defensa de los derechos laborales, y a promover, en cambio, el fortalecimiento del Estado de Derecho y del diálogo social como herramientas indispensables para una sociedad más justa e igualitaria.
Instituto de Derecho Laboral C.A.P.C.R.N.