Los Colegios de Abogados de Viedma, General Roca y Cipolletti comparecieron ante el Superior Tribunal de Justicia de Río Negro en carácter de amicus curiae, realizando el 17 de diciembre una presentación institucional de especial entidad, orientada a reforzar, desarrollar y profundizar los fundamentos de la queja deducida por la Caja Forense contra la sentencia dictada por la Cámara del Trabajo de Bariloche que anuló la resolución 130/15
La decisión de los tres colegios de intervenir en forma conjunta reviste una trascendencia institucional de primer orden, en tanto se trata de entidades representativas de la abogacía organizada que, en el marco de sus funciones legales y estatutarias, asumieron la responsabilidad de poner en conocimiento del máximo órgano judicial de la provincia el alcance real y las consecuencias estructurales del pronunciamiento cuestionado. No se trata, así, de una intervención meramente declarativa, sino de un aporte técnico y jurídico calificado, destinado a colaborar con el tribunal en el análisis de una cuestión que compromete intereses colectivos y un marcado interés público.
En la presentación se desarrolló de manera extensa que la sentencia atacada, de adquirir firmeza, no sólo resolvería una controversia puntual, sino que impactaría de forma directa y profunda sobre el régimen de financiamiento solidario que sustenta a la Caja Forense,
Asimismo, se destacó que la cuestión sometida a revisión trasciende ampliamente el interés de las partes originarias del proceso, proyectándose sobre el conjunto de los profesionales matriculados, tanto activos como pasivos.
Desde esa perspectiva, los colegios intervinientes señalaron que una interpretación judicial que desarticule o debilite las fuentes de financiamiento previstas legalmente compromete el principio de solidaridad, afecta derechos adquiridos y expectativas legítimas, y genera un precedente de enorme gravedad institucional.
En ese marco, los Colegios de Viedma, General Roca y Cipolletti consideraron imprescindible comparecer ante el Superior Tribunal para ilustrar al órgano jurisdiccional sobre las consecuencias jurídicas, económicas e institucionales concretas que derivarían de la eventual consolidación del fallo recurrido.
La presentación enfatizó que el análisis del caso no puede limitarse a una lectura aislada de la normativa aplicable, sino que debe realizarse desde una visión sistémica, ponderando el impacto real de la decisión judicial sobre la estructura y la sostenibilidad de la Caja Forense.
Se dejó expresamente consignado, asimismo, que la demanda que dio origen al proceso y culminó en la sentencia recurrida fue promovida y suscripta por abogados matriculados en el Colegio de Abogados de Bariloche, dato relevante para comprender el contexto del litigio y el derrotero procesal de la causa.
De este modo, la presentación como amicus curiae de los Colegios de Abogados de Viedma, General Roca y Cipolletti se configura como un pronunciamiento institucional de notable peso, orientado a coadyuvar activamente con la función revisora del Superior Tribunal de Justicia, aportar elementos de análisis relevantes para una correcta solución del caso y resguardar la continuidad, estabilidad y sustentabilidad de la Caja Forense, en beneficio de toda la abogacía en general.